El Queso Cottage o requesón es un ingrediente sabroso, cremoso y versátil que merece un lugar permanente en tu heladera. Pero, ¿qué es exactamente el requesón y de dónde es su origen? Acá tenés todo lo que necesitas saber sobre este alimento básico en la cocina.
¿Qué es el Queso Cottage?
El cottage es esencialmente cuajada (que se forma cuando un ácido cuaja la leche) y crema. Al igual que la ricotta, la mozzarella, el feta y el queso de cabra, el requesón es un queso fresco, es decir, no está curado como el parmesano y el cheddar.
Aunque la gente lleva comiendo algo parecido desde hace miles de años, el nombre del Cottage sólo se remonta a mediados del siglo XIX, Se cree que es el primer queso fabricado en Estados Unidos. Se trajo a Estados Unidos desde Europa.
La historia es que el queso cottage solía hacerse en granjas o casas de campo, donde tenían un exceso de leche de la fabricación de manteca y utilizaban la leche extra para hacer queso cottage. De ahí su nombre.
¿Cómo se fabrica?
El cottage se fermenta. Como todos los productos lácteos, comienzan con la leche. La adición de enzimas o cultivos vivos y activos (probióticos) convierte los azúcares de la leche (lactosa) en ácido láctico. El ácido láctico separa la cuajada (los sólidos de la leche, las grasas y las proteínas) del suero (el líquido).
En esta fase, la cuajada es básicamente un bloque sólido de queso. Un cortador de cuajada tipo cuchillo se encarga de cortar el queso en trozos del tamaño de un bocado. Que el cottage sea de cuajada pequeña o grande depende del diseño del cortador de cuajada.
Al cortar la cuajada se libera un montón de suero. Luego escurrimos el suero y nos queda una buena cuajada. Después se mezcla la cuajada con crema.
Sustitutos
¿No hay Cottage? No hay problema. La ricotta es probablemente el mejor sustituto del requesón, ya que tienen sabores y texturas similares. Aquí tienes otras alternativas al requesón que pueden funcionar bien dependiendo de la receta:
- Mascarpone
- Queso feta
- Crema agria
- Queso crema
- Yogur
- Kefir
- Mozzarella
- Queso de cabra
Beneficios
El queso cottage también se ha asociado a varios beneficios para la salud.
- Puede ayudar a prevenir la resistencia a la insulina. La resistencia a la insulina puede conducir al desarrollo de la diabetes de tipo 2 y de enfermedades cardíacas. Sin embargo, se cree que el calcio de los productos lácteos reduce la resistencia a la insulina. De hecho, un estudio sugiere que el consumo de productos lácteos puede reducir el riesgo de resistencia a la insulina en un 21%.
- Puede favorecer la fortaleza de los huesos. Además del calcio, el requesón es una buena fuente de fósforo y proteínas. Estos nutrientes se han relacionado sistemáticamente con la mejora de la salud ósea.
- Alto contenido en selenio. Una porción de 1 taza (226 gramos) de requesón ofrece el 37% de la IDR de selenio. Se ha demostrado que este mineral aumenta la protección antioxidante en la sangre (1, 22Fuente de confianza, 23Fuente de confianza).
¿Qué gusto tiene?
El cottage varía no sólo en el tamaño de la cuajada, sino también en su consistencia y sabor. El requesón no debe tener una textura pastosa o viscosa, debe parecerse al yogur en cuanto a grosor y cremosidad. Una menor separación entre la cuajada y la crema crea una sensación más suave en la boca.
El requesón debe tener un sabor suave, limpio y lechoso, con sólo un toque de sal. Puede tener una sutil acidez dependiendo de cómo se haya cultivado y de su contenido en grasa. El requesón sin grasa y el bajo en grasa (2 por ciento) tienen un sabor más ácido, mientras que el queso entero (4 por ciento) y el alto en grasa (6 por ciento) tienen un sabor más cremoso.
Ideas para servir el requesón
El requesón casero es, por supuesto, delicioso solo o cubierto con fruta. También puede ser salado, añadiendo tomates y cebollas rojas picadas y sazonándolo con pimienta negra molida. Podes convertirlo en salsa combinándolo con salsa ranch, o utilízarlo en lugar de la ricotta cuando hagas lasaña. Sea como sea, el cottage casero es delicioso.
Cómo hacer Cottage en casa
Lo creas o no, puedes hacer cottage casero en la comodidad de tu propia cocina con sólo tres ingredientes: leche, vinagre y sal. También necesitarás una cacerola pequeña, un colador y una tela para el queso.
Ingredientes:
- 4,5 lts de leche entera
- ¾ de taza de vinagre blanco
- 1 cucharadita de sal
- 3 cucharadas de crema de leche
Paso a paso:
- Verter la leche en una olla grande de fondo grueso. Calentar lentamente hasta alcanzar los 190°F/88°C removiendo regularmente para que la leche no se queme en el fondo de la olla.
- Retirar del fuego, verter el vinagre y remover varias veces. Tapar y dejar reposar durante 30 minutos.
- Mientras tanto, forrar un colador con un trozo limpio de gasa doble o un paño de cocina. Colocar el colador sobre otro bol para recoger el líquido (suero) que gotee.
- Con una cuchara, vierta los sólidos de la olla en el colador forrado. Dejar escurrir durante 30 minutos.
- Junte los extremos del paño con fuerza y forme una bola de queso envuelta en el paño. Sujetando ésta con una mano, haga correr agua fría sobre la bola, amasándola y apretándola con la otra mano hasta que toda la bola de queso esté fría.
- Saque el queso del paño y póngalo en un bol y utilice una cuchara para romperlo en pequeñas cuajadas. Añada sal al gusto.
- Para obtener un requesón cremoso, añada 2 cucharadas de crema cada vez hasta que adquiera la consistencia deseada. Compruebe el sabor y añada más sal si es necesario.
- Enfriar durante al menos 1 hora y remover antes de servir.
Diferencias entre Ricotta vs. Cottage
El requesón y el ricotta se parecen, y a veces uno puede sustituir al otro, pero son cosas muy diferentes. Mientras que el requesón se elabora con leche de vaca coagulada, el requesón se hace con los subproductos de otros quesos (como la mozzarella). También se diferencian en la textura y el sabor: el requesón es grueso y ligeramente salado, pero el requesón es cremoso y ligeramente dulce.
El requesón puede utilizarse en lugar del requesón en ciertas recetas cocinadas (como la lasaña), ya que tiene una textura similar y menos calorías.
Cómo consumir el requesón
El requesón se puede consumir de la misma manera que el yogur: solo, acompañado de fruta o verdura, mezclado en batidos o incluso cocinado en recetas.
Cómo conservar el requesón
Guarda el requesón en el frigorífico en un recipiente hermético (el que viene probablemente esté bien). Manténgalo boca abajo para frenar el crecimiento de las bacterias. Si se almacena correctamente, debería durar unos 10 días después de abrirlo.
¿Se puede congelar el requesón?
Se puede congelar el requesón, aunque se altera ligeramente su textura. Es mejor consumirlo fresco o congelar sólo el requesón con el que vayas a cocinar. Cuando hornees lasaña con requesón, por ejemplo, no deberías notar la diferencia entre el requesón fresco o el congelado.
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Tabla nutricional
El perfil nutricional del requesón varía en función del nivel de grasa láctea utilizado y de la cantidad de sodio añadida.
Una taza (226 gramos) de requesón bajo en grasa (1% de grasa láctea) aporta lo siguiente:
Calorías 163
Proteínas: 28 gramos
Carbohidratos: 6,2 gramos
Grasa: 2,3 gramos
Fósforo: 24% de la ingesta diaria de referencia (IDR)
Sodio: 30% de la IDR
Selenio: 37% de la IDR
Vitamina B12: 59% de la IDR
Riboflavina: 29% de la IDR
Calcio: 11% de la IDR
Folato: 7% de la IDR
También tiene cantidades decentes de vitamina B6, colina, zinc y cobre.
El contenido de carbohidratos del requesón ronda el 3%. Está compuesto por lactosa, un azúcar de la leche al que algunas personas son intolerantes.
Cuando consuma grandes cantidades de cottage, considere la posibilidad de comprar variedades bajas en sodio o sin sodio. Un consumo elevado de sodio eleva la presión arterial en algunas personas, lo que puede aumentar el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas.
Cabe destacar que las proteínas representan más del 70% de las calorías del requesón.
En síntesis, el requesón es una excelente fuente de proteínas y contiene relativamente pocas calorías. También está repleto de muchos nutrientes, como vitaminas del grupo B, calcio, fósforo y selenio.
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